El consejero Mohamed Ahmed ha comparecido esta mañana ante los medios de comunicación para dar cuenta del proceso seguido en la contratación de Kiko & Shara y del polémico concierto ofrecido el pasado sábado por la noche en las pistas deportivas del barrio de Las Palmeras. Dice que, “a razón de lo que está siendo un tema que, por lo que se ve, preocupa a la ciudadanía y, en especial a los miembros de la oposición”, lo primero que ha hecho el responsable del área de Distritos, Juventud y Participación Ciudadana es dar a conocer un audio del propio Kiko enviado al promotor y en el que pide disculpas. Apunta que “habló en caliente en base a ciertas personas que se dedicaron a calentarnos” desde que llegaron a Melilla, “a malmeter y a dar información equivocada”.
Adjudicado por 56.200 euros, aclara el consejero que ese total se divide en cuatro empresas “para que puedan participar y trabajar de esto”, cuatro contratos menores a Moniach Global SL, Rusadir Servicios Globales SL, Mind Abarkan y Dexfire Melilla SL. Un primer servicio de traslado, estancia y caché de los artistas de 15.000 euros; el de carga/descarta y montaje/ desmontaje del escenario de 13.800 euros; el servicio de limpieza, staff, vigilancia y seguridad de 12.500 euros y, por último, el servicio del ryder técnico por valor de 14.900 euros. Esos contratos se formalizan 24 horas antes del concierto.
“Escasez de recursos”
Matiza que la consejería “no contrata directamente” y llega a asumir “la parte de responsabilidad correspondiente” a la falta de publicidad para promocionar el concierto. No obstante, indica que no se pudo desarrollar una campaña publicitaria “por una cuestión de escasez de recursos, por no contar con el personal suficiente”. De hecho, cree que si hoy tiene que dar explicaciones “no es tanto por el detalle del coste, sino porque no se dio la suficiente publicidad”, en “no haber cubierto las expectativas en cuanto al aforo”.
Se pronuncia sobre por qué se organiza el concierto de Kiko & Shara en las pistas deportivas del barrio de Las Palmeras. Explica que la primera opción fue la Plaza de Toros, pero en ese espacio se estaban celebrando las Cruces de Mayo, “además de verbenas de las cofradías”. La segunda opción fue el Auditórium Carvajal, pero “en conversación” con la consejera de Cultura se descartó “porque estaba en situación de obras”. Así pues, “por la concurrencia de diversos eventos”, se optó por buscar una tercera opción “más arriesgada” y que fue la del barrio de Las Palmeras.
Detrás de la contratación de Kiko & Shara está la misma empresa que participó en la organización en julio de 2022 de la primera edición Green Festival ‘Ciudad de Melilla’, una empresa con un objeto social que nada tiene que ver con este tipo de actividades, pero que, remarca el consejero, sí cumple los requisitos para su adjudicación.