La Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME) denuncia que el pasado 11 de mayo el Tercio Gran Capitán 1 de la Legión, en una revista de personal, sustituyó a los militares que estaban de baja por unos conos en los que se colocaron carteles con sus nombres y apellidos y el motivo de la ausencia, un acto que “va en contra de la norma” y que se considera como posible vulneración de la confidencialidad de los datos médicos.
Subraya Marco Antonio Gómez en los micrófonos de COPE Melilla que este tipo de sucesos “tendrían que estar más que superados” porque, dice, se trata de un quebrantamiento de la ley de protección de datos. No comprende cuál es la intención de anunciar la baja psicológica de un soldado, aunque cree que se podría buscar la “desaprobación de sus compañeros” o “ridiculizar” a la persona en cuestión.
Avanza el presidente de ATME que se han elevado una serie de preguntas al Ministerio de Defensa para que “aclare lo sucedido y tome las medidas oportunas”. Defiende que cuando un militar “hace algo” se le sanciona y cree que debería ocurrir lo mismo cuando se vulnera un derecho fundamental. Por otro lado, detalla que el departamento jurídico de la asociación ha estudiado el caso antes de “actuar en caliente” y anuncia que ahora se está a la espera de una respuesta.
Destaca Marco Antonio Gómez que en la última visita de ATME a Melilla varios socios trasladaron “muchos problemas con esta unidad” relacionados con bajas médicas, por lo que no es la primera vez que se dan situaciones que “van en contra de la norma”. Explica que “lamentablemente” los jefes de unidad tienen la potestad de “dar o quitar” una baja después de que un facultativo civil pase el correspondiente informe médico.