Coalición por Melilla (CpM) achaca a la falta de personal técnico y administrativo en la “actual” Consejería de Fomento el hecho de que se haya “ralentizado” el proceso para emitir las cédulas de habitabilidad, las licencias de primera ocupación y otros informes e inspecciones técnicas. Dice el diputado Rachid Bussian que empresarios, particulares, promotores, constructores, arquitectos y aparejadores “están lanzando un mensaje de SOS a la Administración local”.
Señala que se está “desmantelando” una de las estructuras administrativas “más importante de cualquier Ejecutivo” debido, en buena parte, a que “el único arquitecto superior” ha sido nombrado director general.
“Mención especial” merece la emisión de la cédula de habitabilidad, imprescindible para, por ejemplo, poder acceder a la ayuda al alquiler. Apunta Bussian que no se emiten “en tiempo y forma, perjudicando gravemente al ciudadano”. Desde CpM se entiende que urge una solución “inmediata”, dotar esa Dirección General de Fomento “del personal necesario y cualificado”. En este sentido, recuerda que “es algo de lo que ya como anterior consejero de Infraestructuras y Urbanismo me quejaba amargamente con Administraciones Públicas y con Intervención y ahora desde la oposición vemos cómo la situación se viene agravando”.
“Melilla no se tiene que quedar atrás”
Añade que esta situación “está provocando una incidencia muy negativa a la economía local” porque se destruye empleo, se dejan de crear nuevos puestos de trabajo, no se paga a los proveedores y la entrega de las viviendas “se retrasa de manera considerable”. Concluye matizando que hay que tener en cuenta que “el resto del panorama nacional e internacional ha optado por el sector de la construcción como recuperador de la economía, por lo que entendemos que Melilla no se tiene que quedar atrás, sobre todo por esa incidencia negativa en una de las economías circulares más importantes de nuestra ciudad”.