CSIF denuncia un intento de agresión “muy violento” a una docente y la irrupción de cuatro individuos “encapuchados” en un centro educativo, situaciones que considera que se pueden frenar con la implantación de protocolos de actuación ante casos de bullying y LGTBfobia y la contratación de vigilantes de seguridad.
Explica el sindicato que la profesora recibió “insultos y amenazas verbales” que no llegaron a más porque varios compañeros consiguieron contener al estudiante, “quien se mostró extremadamente violento y agresivo”. Un hecho que se resolvió con el aviso al Grupo de Menores de la Policía Nacional y con la apertura de un expediente disciplinario.
En cuanto a la entrada de cuatro personas que “sembraron el temor entre la comunidad educativa” del otro centro, señala que “afortunadamente” abandonaron las instalaciones sin ocasionar ningún perjuicio, aunque dejando un “sentimiento de inseguridad”.
Lamenta CSIF que este tipo de situaciones son frecuentes en las aulas y lo achaca a una “sociedad cambiante con un descontrolado mal uso de las tecnologías”. En este sentido, detalla que el acceso de los menores de edad a contenidos violentos e inadecuados está “completamente fuera de control”, reemplazando el rol de los padres y docentes por el de personajes “no siempre bienintencionados”.
Asegura que es posible adelantarse a los acontecimientos si la Administración “toma cartas en el asunto” con la contratación de más profesionales de orientación educativa y apoyo para atender las necesidades específicas del alumnado y prevenir actitudes disruptivas.