Vox Melilla ha aprovechado su segunda interpelación en el Pleno de Control al Gobierno de hoy para preguntarle al Ejecutivo local qué criterios sanitarios se siguieron para ordenar en su momento el cierre del interior de los locales de hostelería y gimnasios.
El diputado de la formación, Javier Da Costa, rechaza este tipo de medidas “abusivas, injustas y carentes de cualquier rigor clínico” porque lo único que consiguen, dice, es llevar a la ruina a sendos sectores.
Vox lamenta que el Gobierno haya venido “penalizando” a los empresarios de la ciudad desde el inicio de la pandemia, imponiéndoles medidas que han demostrado ser “arbitrarias” e “ineficaces” para frenar los contagios. Da Costa critica que estas restricciones se hayan establecido sin consenso alguno y se pregunta para qué se creó la Comisión Covid si no se ha celebrado ni una sola reunión, pese a estar en una situación de crisis sanitaria.
El diputado de la formación insiste en que el Ejecutivo está gobernando y publicando órdenes “a golpe de telediario”, de forma improvisada y sin una prueba fehaciente de que los contagios se producen en el interior de los locales de hostelería y de los gimnasios.
A juicio de Da Costa, lo que tendría que haber hecho el Gobierno es proceder a la vacunación masiva de la población melillense, aumentar el equipo de rastreadores y solicitar una PCR a toda persona que accediera a la ciudad.
Por último, y al igual que ha hecho el PP, Vox le ha preguntado al consejero de Economía y Políticas Sociales qué pasará a partir del 9 de mayo cuando decaiga el Estado de Alarma. También duda de que a partir del día 10 vayan a llegar más de 5.000 vacunas semanales a Melilla contra la Covid.