El consejero de Hacienda aclara que las facturas impagadas por valor de casi un millón de euros a las que Elena Fernández Treviño hace referencia en su rueda de prensa están emitidas en el año 2022 siendo gestión del Gobierno tripartido en el que la socialista tenía responsabilidades.
Daniel Conesa solicita a la diputada del PSOE local que “se calle la boca”, a pesar de tener derecho para usar su libertad de expresión, porque es normal que en un cambio de color político en la Ciudad Autónoma se tengan que abonar facturas de contratos proyectados por el Ejecutivo anterior, aunque no se esté de acuerdo con ese gasto del dinero público.
Una inquietud que ha mostrado Treviño que “contrasta con la despreocupación” de todos aquellos contratos menores efectuados por sus ex compañeros de Coalición por Melilla que “están siendo investigados”.
Lamenta el popular que siga sin comprender que la decisión de mantener cerrado el Teatro Kursaal “no se ha tomado por gusto”, sino porque se han detectado una serie de deficiencias que ya ha especificado la consejera de Cultura y que impiden que se pueda garantizar la seguridad para abrir este espacio al público melillense.
Critica que durante la pandemia no se haya aprovechado los casi dos años que el inmueble ha estado cerrado para acometer las obras de mantenimiento necesarias para que no se hubiese tenido que llegar a esta situación.