El presidente de la Ciudad reconoce que Melilla vive una situación de “calma tensa” por los últimos acontecimientos que se han registrado en materia migratoria, con cientos de marroquíes intentando acceder a territorio nacional de forma irregular y violenta. Así lo ha dicho Eduardo de Castro en los micrófonos de COPE en una entrevista concedida a Carlos Herrera.
Tras los intentos de entrada que se han dado este fin de semana, el jefe del Ejecutivo local apunta que la tranquilidad que vive la ciudad ahora mismo es “relativa” porque es consciente, señala, de que en cualquier momento “puede haber un rebrote”. Señala que la presión migratoria y las avalanchas de irregulares pueden volver a darse, aunque confía en que no sea así.
Preguntado por si se ha reforzado el dispositivo de medios humanos para frenar las entradas, De Castro ha dicho que sí y ha recordado que el Gobierno central ha enviado a Melilla a 60 guardias civiles, además de incrementar el número de agentes del Cuerpo Nacional de Policía con 50 efectivos más. Añade también que, tal y como le pidió a Pedro Sánchez, el Ejército está reforzando las labores de vigilancia y seguridad en todo el perímetro fronterizo.
En este contexto y centrándose en los últimos días, el jefe del Ejecutivo local pone el acento en el hecho de que por primera vez sean marroquíes, y no subsaharianos, por ejemplo, quienes están violentado las fronteras de Melilla para intentar acceder a la ciudad autónoma. Asegura que esto es la primera vez que pasa y que nunca antes había ocurrido algo así.
Sobre si funcionan los llamados “rechazos en frontera”, De Castro ha dicho que sí y ha aclarado que aquellos a los que “se les coge en la valla” son devueltos al país vecino.