Jesús Delgado Aboy ha dejado claro esta mañana que no se ha ido “voluntariamente” de Vox. Aclara que ha sido una decisión de la dirección nacional de la formación y consecuencia de la traición de algunos de sus compañeros. El diputado no adscrito a la Asamblea subraya que “no renunciará ni a un solo punto de aquellos con los que se comprometió con los melillenses en época electoral”.
Tras remarcar que él está en la Asamblea por el apoyo ciudadano y no porque le pusiera un partido, Delgado Aboy ha señalado que “las cosas en la ciudad no están para más odios africanos y rencores”. Cree que la situación económica de Melilla “es de alarma social”, por lo que es “tiempo de sumar y no de dividir”.
Tampoco entiende el diputado no adscrito que se le critique por apoyar los Presupuestos del Gobierno local, unos presupuestos que, “aunque para unos puede ser bueno y malo para otros, suponen una hoja de ruta para empezar a trabajar en la búsqueda de soluciones a los problemas locales.
Delegado Aboy subraya que “para que no se confunda nadie” apostará por “una unidad de acción” como única fórmula para sacar a Melilla del “atolladero” en el que está metida desde hace años.
Sobre su relación con el partido, asegura que es inexistente y apunta que es un diputado “autónomo”. Apunta que han sido muchas veces las que ha estado en contra de las directrices de la formación como ha sido lo ha manifestado con su actitud.