Con motivo de la situación de emergencia sanitaria provocada por la pandemia de COVID-19, el Colegio Oficial de la Psicología (COP) de Melilla ha puesto al Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias y Catástrofes (GIPEC) al servicio de las personas que contraigan la infección por coronavirus y se encuentren aislados, “independientemente de si ese aislamiento es hospitalario o domiciliario”. El objetivo es proporcionar asistencia psicológica a estos pacientes “para contribuir a mejorar su situación actual, gestionando las emociones asociadas tanto a su situación de enfermedad como al aislamiento”.
Sufragado y coordinado en su totalidad por el Colegio Oficial de la Psicología de Melilla, este servicio será prestado por un nueve psicólogas y psicólogos del GIPEC a través de la plataforma de teleasistencia que ha sido habilitada por el Colegio Oficial de la Psicología. La atención es totalmente y se ofrecerán citas de lunes a viernes de 10.00 a 13.00 horas y de 16.00 a 21.00 horas, además de los fines de semana, “cuando se designarán turnos de guardia rotatorios que se adaptarán a las necesidades del servicio”.
Además, este servicio se podrá prestar a todos los sanitarios melillenses en activo que requieran asistencia psicológica “para descarga emocional durante la lucha contra el COVID-19”. De este modo, el Colegio Oficial de la Psicología de Melilla “desea reconocer y agradecer la labor que realizan en nuestra ciudad los médicos, enfermeros, auxiliares de enfermería, técnicos y resto de personal sanitario”.
Para solicitarlo, el paciente deberá comunicar al personal de enfermería su necesidad de asistencia psicológica. El personal, que ya ha sido debidamente informado, explicará el procedimiento a seguir y se pondrá en contacto con la coordinación del GIPEC, que asignará una cita en el horario de teleasistencia.
Esta iniciativa de gestión psicológica de la emergencia sanitaria ha surgido a raíz del contacto entre los profesionales del COP y el Servicio de Enfermería del Hospital Comarcal, “que ha solicitado expresamente la cooperación del GIPEC tras conocer la disponibilidad de los colegiados, sin que haya existido mediación o coordinación alguna por parte de las instituciones, el Gobierno local o el Ingesa”.