El Partido Socialista celebra que el pliego del servicio de limpieza recoja doce de sus propuestas, aunque mantendrá la labor de control y fiscalización sobre la Consejería de Medio Ambiente porque han quedado fuera propuestas “de relevancia”.
Rafael Robles ha explicado que su formación ha decidido abstenerse porque se presentaron un total de 31 enmiendas para la mejora del contrato y han quedado fuera algunas propuestas que se considera que son “de relevancia”, como es el caso de implantar medidas para minimizar los riesgos de golpes de calor por el incremento de las temperaturas en verano.
Los socialistas han puesto el foco en la mejora de las condiciones de trabajo de la plantilla, la optimización y racionalización del servicio preservando el medio ambiente. Se han aceptado medidas como la iluminación con leds para disminuir la peligrosidad, aumentar la frecuencia de limpieza y la ampliación de contenedores, el uso de sopladores con bajo impacto sonoro, mejoras en las técnicas de baldeo, la limpieza de imbornales para minimizar el riesgo de padecer accidentes e inundaciones y evitar que se desbroce la vegetación en las zonas periféricas.