El Servicio de Salvamento, Socorrismo y Primeros Auxilios ha intervenido en los últimos diez días en varios rescates de menores de edad y bajadas de azúcar.
Destaca Laura Mizzi en los micrófonos de COPE Melilla que, aunque las incidencias más comunes son “pequeños cortes” y picaduras de medusa y pez araña, los socorristas han actuado en varios rescates de menores. Uno de ellos fue el de dos hermanos en la playa de la Hípica. Comenta que la hermana mayor “quiso ayudar al pequeño a salir del agua, pero se cansó”. El socorrista vio lo que estaba sucediendo y, junto a una embarcación de apoyo, sacó a los dos menores del agua. Aunque “aparentemente” estaban bien, la niña sufría mareos –“posiblemente por la situación de estrés”- y se llamó a una ambulancia para prevenir. Otra situación parecida se dio en San Lorenzo un día de levante. Una niña de unos once o doce años se alejó de la orilla y no podía volver “por la corriente y la resaca”. En este caso, la menor “empezó a gritar” hasta que un bañista la escuchó y no dudó en meterse en el agua para socorrerla. El socorrista se percató de lo que estaba sucediendo y también actuó.
Explica la coordinadora del servicio que en la última semana también se ha atendido a una persona por una bajada de azúcar y a un menor que “había tragado mucha agua”. Este último caso ocurrió ayer en torno a las 20.00 horas en la playa de Los Cárabos, cuando una pareja llevó al niño al puesto de socorro. La enfermera del servicio comprobó que tenía la saturación y la tensión baja, por lo que se decidió llamar a una ambulancia para prevenir. En el caso de la bajada de azúcar, comenta que sucedió hace unos días en el Hipódromo. La mujer “se encontraba mal” y también se optó por avisar a una ambulancia porque a la sanitaria “no le gustaron mucho los valores” que presentaba.