Después de la polémica suscitada a partir de la recién aprobada LOMLOE en el Congreso de los Diputados con tan solo 177 votos a favor, la Federación de Enseñanza del sindicato USO (FEUSO) considera que, “para ser duradera”, esta nueva ley debería haber contado con el suficiente consenso.
Apunta que “las formas” en las que se ha aprobado hace pensar que durará poco en el tiempo “y, seguramente, sea cambiada en cuanto lleguen otros partidos políticos al poder”. Se denuncia que “en ningún momento se ha pensado en las familias ni en los docentes del país, que ya están agotados de tantos cambios de leyes de educación”. Defiende FEUSO que España necesita “urgentemente” un pacto de Estado por la educación “con una ley consensuada con un apoyo del cien por cien”.
FEUSO apuesta por el derecho de elección de centros educativos, por la “complementariedad” de los modelos de enseñanza públicos, privados y concertados, por la libertad de elección de la asignatura de Religión y por el castellano como lengua vehicular del país. No al cierre de los centros de educación especial ni a la promoción del alumnado con varias materias suspensas.
Sin embargo, el sindicato echa en falta otras demandas que califica de “extrema urgencia” como, por ejemplo, la rebaja de la ratio a 15 alumnos por aula, la reducción de la carga lectiva del profesorado “y el establecimiento de un sistema que dé respuesta de una vez por todas al problema de los interinos en fraude de ley”. Cuestiones que, se indica, son las que deben atenderse con mayor celeridad “y no apresurarse en aprobar una ley educativa que cuenta con tantos sectores en contra”.