Fadela Mohatar y Francisco Díaz tachan de “indecentes” las declaraciones de la exconsejera Elena Fernández Treviño y critican que haya “dejado las partidas del área de Cultura a cero” por lo que ha tenido que ser necesario derivar recursos de otras consejerías para poder organizar la Feria o el Día de Melilla.
Mohatar determina que el Gobierno local está liderado por el consenso de todos sus miembros, no como antes que estaba conformado por “tres reinos de taifas”, y que, por este motivo, se ha conseguido sacar adelante, no solo la agenda cultural que ofrece el Gobierno local, sino haber podido lanzar la Línea 8, “que ha estado un año parada en un cajón”, o las ayudas covid.
Lamenta que, después de haber tenido que anunciar la “triste decisión” que ha tomado como consejera de Cultura ante la imposibilidad de reabrir tras el verano el Teatro Kursaal, se hayan escuchado las acusaciones de la socialista que están “lejos de la realidad”.
Determina que esta mañana ya ha aterrizado en la ciudad un “equipo experto” que va ha evaluar toda la infraestructura para detectar las deficiencias sobre las que se debe actuar porque, dice, “el primer interesado en que se abra el teatro es el Gobierno” y Mohatar se considera optimista y fecha que para comienzos de 2024 el Kursaal podrá volver a abrirse”. Además, el lunes que viene mantendrá una reunión con todas las compañías relacionadas con la vida cultural de Melilla para poder explicarles la situación.
En cualquier caso, explica que el objetivo principal es garantizar la seguridad de la instalación y relata que en el informe se lee literalmente que “en el suelo del escenario se corre un riesgo alto para las personas” haciendo imposible la instalación de la concha acústica necesarias para los conciertos de música.
Critica que “el Palacio de Exposiciones y Congresos está hecho unos zorros” donde no se ha realizado ningún arreglo ni mantenimiento a pesar de que Gloria Rojas disponía de convenios millonarios firmados y “sin ejecutar”. Se trata de uno de los espacios que se ha evaluado para poder derivar parte de la agenda cultural de este primer trimestre tras el cierre, al igual que el Cine Perelló, aunque necesitaría ciertos arreglos.
Por su parte, Francisco Díaz, mantiene la crítica en los mismos términos que su compañera y señala la “dejadez absoluta” sobre todo el patrimonio cultural y las “trampas” que se han detectado en las diferentes áreas gestionadas por el Partido Socialista dejando serias deudas de hasta 500.000 euros en sus competencias.