Juan José Imbroda considera que el Gobierno local debería retirarse “inmediatamente” ante “la gravedad de los hechos que están ocurriendo» en Melilla. Sostiene que el secretario general de la corporación y los “altos dirigentes de funcionarios” tendrían que encargarse de la Administración hasta que se constituya la Asamblea porque, asegura, se está “estirando el tiempo para ocultar pruebas”.
Refiriéndose a la operación policial que la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional desarrolla en la Administración local y que está relacionada con la investigación judicial por la presunta compra de votos, dice el presidente electo que “ya está bien el espectáculo” que se está dando a nivel nacional.
Critica que la Presidencia de Eduardo de Castro “ha servido para tapar todas las tropelías que se han cometido” en esta legislatura, de ahí a que la Fiscalía General del Estado sospeche que se han producido “posibles delitos gravísimos”.