El presidente del PP de Melilla, Juan José Imbroda, se ha mostrado muy tajante este miércoles y ha pedido la dimisión del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, al entender que han abandonado a Melilla en el ámbito migratorio, un problema éste “gravísimo”, dice, que se agudiza en medio de la pandemia en la que nos encontramos.
El número uno de los populares melillenses condena que el Gobierno central no haya reaccionado ante ninguno de los problemas que sufre la ciudad como, por ejemplo, los altercados y la saturación del CETI o de la Plaza de Toros. Asegura Imbroda que “Melilla tiene ahora un problema tremendo” y que la situación se ha “desbocado”.
El presidente del Partido Popular considera que la Administración central debería haber acelerado las salidas a la península de los inmigrantes que están en el CETI porque entiende que la inmigración “es un problema de toda España”. Apunta que Melilla “no puede ser un almacén de inmigrantes” sobre todo cuando en muchas ocasiones estas personas viven en unas condiciones “penosísimas” para ellos.
Imbroda insiste en que el Gobierno central “no puede abandonar a Melilla a su suerte” en un problema tan grave como es este. Critica, además, que los melillenses cuenten con un Ejecutivo local “complaciente” que únicamente se dedica a lanzar “mensajes de adormideras” para que la opinión pública no vea la realidad del problema.
Entendiendo que la situación actual “no es fácil”, recuerda Imbroda que el PP siempre ha querido colaborar con el Gobierno y no hacer sangre ni política de lo que estaba sucediendo en la ciudad, pero entiende que con los últimos acontecimientos y altercados en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes es hora de decir “basta” y de plantarse al Ejecutivo de la Nación