Con los votos en contra de los diputados de Vox, la Asamblea de Melilla ha aprobado esta mañana el Plan de Acción y Mitigación para el Clima y la Energía Sostenible.
El diputado del PSOE, Rafael Robles, ha puesto en valor algunas de las medidas que su grupo viene defendiendo y que son claves, a su juicio, para afrontar la crisis climática en la que nos encontramos. Entre ellas, ha destacado la declaración de emergencia climática, las mociones medioambientales que se han presentado (‘Un bebe un árbol’), el reglamento de conservación del arbolado urbano o las actuaciones encaminadas a impulsar la movilidad sostenible.
El socialista sostiene también que el Gobierno debería abordar otras iniciativas que están íntimamente relacionadas con este plan de acción como es la implantación de la Zona de Bajas Emisiones. Además, critica que el espigón de la Hípica se haya abierto al tráfico rodado.
Por su parte, Amín Azmani, diputado de Somos Melilla, ha recordado que la Asamblea de Melilla firmo en el año 2015 una declaración para combatir la crisis climática. No obstante, lamenta que en ocho años poco se haya hecho al respecto.
La formación recuerda que Melilla cuenta con la planta de Endesa en el centro de la ciudad, que existen vertidos de aguas fecales en la desembocadura del río, que “el agua que sale de los grifos de los hogares de los melillenses no es apta para el consumo” y que todavía hay mucho por hacer en lo que a la gestión de vertidos se refiere.
Azmani también le ha reprochado al Gobierno que se haya tardado más de un año en abonar las ayudas públicas para la instalación de placas solares. Entiende el presidente de Somos Melilla que, por todo lo expuesto, la ciudad “está bastante lejos” de ser un referente y modelo “en mitigación del cambio climático”.
El consejero de Medio Ambiente, Daniel Ventura, ha respondido a todas estas declaraciones.
Al PSOE le ha dejado claro que el Ejecutivo está trabajando en la implantación de la Zona de Bajas Emisiones, pero le recuerda que su formación estuvo en el gobierno hace cuatro años y poco o nada hizo al respecto.
El popular tampoco entiende la preocupación de los socialistas por el hecho de que el espigón de la Hípica se haya abierto al tráfico. Asegura que “no hay ni un solo motivo” para mantenerlo cerrado y le afea que lleve más de un año preocupado por este asunto y no de la Zona de Especial Conservación de Aguadú “que se ha cargado su Gobierno”.
Del presidente de Somos Melilla, ha lamentado Ventura el discurso “melancólico, catastrofista y derrotista” de Amin Azmani y asegura que la situación de la ciudad “no es tan mala” como quiere hacer ver. Cree que su visión no es compartida por la mayoría de los melillenses.