La Asociación de Autónomos del Taxi tiene previsto entregar a finales de esta semana la documentación pertinente para que la Ciudad pueda concederle una subvención de 40.000 euros, subvención reflejada en los presupuestos y que se congeló con motivo de la pandemia del coronavirus.
En declaraciones a COPE Melilla, el presidente del sector, Karim Mohamed, ha explicado que con esta partida la asociación tiene previsto comprar taxímetros nuevos y renovar las emisoras y los luminosos de los vehículos. Preguntado por cuándo podrían recibir esta cuantía de 40.000 euros, aclara que eso dependerá de la celeridad de la Administración local, una vez que ellos le entreguen los documentos necesarios para tramitar esta ayuda.
Con cargo a esta partida, ha dicho, se pretende además impulsar una aplicación móvil para que el melillense pueda solicitar el taxi sin necesidad de tener que llamar a la parada. Con este sistema, el cliente podrá ver también cuánto le costará el recorrido que desea realizar.
La concesión de esta subvención fue uno de los temas que abordó la Asociación de Autónomos del Taxi con la Consejería de Medio Ambiente en la reunión que han mantenido esta semana, pero no fue el único.
Karim Mohamed ha informado de que también se le expuso al Gobierno local la mala situación económica por la que atraviesa el sector y que se ve agravada por el cierre de la frontera. Esta es la razón por la que se ha planteado la posibilidad de “reestructurar” el servicio, poner en marcha campañas de promoción e, incluso, implantar una “tarifa plana”. No obstante, entiende que todas estas medidas deben contar con el apoyo de la Administración para compensar los gastos que se hagan y las pérdidas que se registren.
Mohamed reconoce que, pese a que ha finalizado el confinamiento, la situación para el sector no mejora. Recuerda que hay pocos clientes y eso, señala, que no están trabajando todos los taxistas, solo el 50 por ciento. El presidente de la Asociación del Taxi cree que la Administración debe tomar cartas en el asunto porque hay muchas familias, unas cien, que lo están pasando muy mal.