El presidente de la Autoridad Portuaria, Víctor Gamero, ha presentado las cuentas de explotación del Puerto de Melilla del año 2022 en las que, a pesar de continuar con la pérdida en el tráfico de mercancías y pasajeros respecto al momento previo a la pandemia, ha conseguido reducir el endeudamiento y recortar distancia con el dato de 2019. Celebra que se esté más cerca del objetivo de la autofinanciación para no tener que depender íntegramente del fondo de compensación.
Concretamente, se ha pasado de un total de 863 toneladas de mercancía en el año 2019 a 565 toneladas en la actualidad. Gamero señalada que también ha existido “un descenso enorme” en el caso del tráfico de pasajeros porque, en el año previo a la pandemia, se contaba con 842.000 personas y en 2022 se ha mantenido el dato en unos 638.000 pasajeros a pesar de haber retomado por primera vez tras la pandemia la Operación Paso del Estrecho (OPE).
Lamenta las pérdidas económicas que se han registrado en el Puerto de Melilla llegando a casi ocho millones de euros en el 2020 y que en el último año se ha conseguido estabilizar en los 2,1 millones, algo que denota “una mejora de la gestión” de la Autoridad Portuaria “porque no puede depender permanentemente del fondo de compensación”. Sentencia que la “contención de los gastos” y los ingresos derivados de cuestiones patrimoniales -como el aumento del canon de Endesa por el arrendamiento del suelo de la planta eléctrica- son los principales motivos que han contribuido a que se recorte la deuda.
Reclama Gamero la declaración como “puerto estratégico” por las importantes bonificaciones que ofrece y que permitiría aumentar el volumen de negocio para conseguir el objetivo final que es “la autofinanciación del Puerto de Melilla”.