Miembros de la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME) han mantenido una reunión con la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, y el director provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social, Augusto Hoyos, para tratar de comprender las dudas existentes en torno a la aplicación del nuevo sistema para la bonificación de la Seguridad Social a las cuotas patronales.
Enrique Alcoba lamenta el “agravio comparativo” que esto va a producir entre trabajadores de la misma plantilla y señala que las exigencias para poder recibir la subvención pertinente van a provocar que las nuevas contrataciones sean “inviables”.
El presidente de la CEME señala que “ha cambiado un poco el sentir” de la patronal porque “es un alivio” que los contratos anteriores al 31 de agosto no se vean afectados por esta medida, pero ha mostrado su “preocupación” por las exigencias que plantea el nuevo modelo en el que la entidad está sumando apoyos de la Asamblea de Melilla y los agentes implicados en Ceuta para poder elevar una solicitud para la derogación del Real Decreto-Ley 1/2023.
Expone que las personas contratadas deben ser menores de 30 años, permanecer tres años en la empresa, no haber tenido una baja voluntaria en otro empleo, no haber trabajado en el mismo lugar en los últimos 12 meses, ni ser familiar directo del empresario. Una cantidad de exigencias que se imponen con este nuevo sistema que, sentencia Alcoba, “va a ser inviable” poder contratar nuevo personal.
Lamenta que esto “limita muchísimo” la actividad de la patronal en las ciudades autónoma porque “casi ninguna empresa va a solicitar la subvención” y, por lo tanto, afectará a la nómina de los trabajadores. No comprende la Confederación de Empresarios que los sindicatos en Melilla “se hayan descolgado” de esta reivindicación porque, para que los empleados puedan cobrar la cantidad aplicada, “habría que negociarlo nuevamente como en el 2004”.
Cree que la delegada del Gobierno “ha tomado nota de todo” para trasmitirlo a Madrid, aunque parece que se continuará viviendo en un limbo hasta que se pueda conformar un nuevo Ejecutivo central provocando una gran “inseguridad jurídica”.
Critica el presidente de la CEME que se les ha dado un trato “como si se estuviera en el colegio” cuando los empresarios han manifestado su malestar por las últimas declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores afirmando que la hoja de ruta con Marruecos ha sido “un éxito”. Ha sido una situación que ha sorprendido a los miembros de la CEME que se han visto “sorprendidos” porque toda Melilla “es consciente del perjuicio” que el cierre de la aduana comercial y la falta de un régimen de viajeros bidireccional ha provocado en la economía local.