La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha licitado por algo más de 23,4 millones de euros el contrato de obras y servicio para la ampliación de la planta desalinizadora y su explotación durante la ejecución de las obras y la puesta en marcha. El plazo total de ejecución del contrato es de 27 meses, 24 de trabajos y 3 de puesta en marcha de las obras de ampliación. La financiación de estas actuaciones se prevé con fondos FEDER y con fondos propios del organismo de cuenca.
Desde la Confederación se recuerda que se ha conseguido desbloquear la modernización de la planta para la que se redactaron hasta 3 proyectos de mejora desde 2015. Aunque los tres superaron la tramitación ambiental, ninguno garantizaba la actividad de la instalación mientras se realizaban las obras para seguir abasteciendo a la Ciudad Autónoma
Para tal fin, se redactó un nuevo expediente que integra los tres proyectos anteriores, aprobados ambientalmente, a los que se le suma la explotación de la desaladora existente durante las obras.
La ampliación de la desalinizadora de Melilla contempla, entre otros trabajos, el incremento de la capacidad de producción de la planta hasta los 30.000 m³/día, lo que garantizará el abastecimiento de agua en calidad y cantidad poniendo fin a los cortes sufridos durante los últimos años.
Además, se plantea el incremento de la capacidad de filtración, la mejora de la protección frente a oleajes extremos; un segundo depósito de agua filtrada y una segunda toma de agua marina para poder realizar el mantenimiento; y la reducción del consumo de energía, al incorporar sistemas de mayor rendimiento, entre otros.