La Ciudad Autónoma aprueba su adhesión al Pacto de las Alcaldías por el Clima y la Energía para articular medidas en el seno de la Administración local que promuevan políticas verdes que estén en consonancia con la normativa europea. Un punto del Pleno de la Asamblea que ha contado con la oposición de VOX, que considera que supone un “retroceso”.
José Miguel Tasende defiende que este tipo de acuerdos abogan por ser más dependientes de Argelia o Marruecos “menoscabando la calidad de vida de los españoles”. Determina que, a nivel europeo, cada día se legisla en contra “de los intereses” de los agricultores nacionales, “abriendo las puertas a productos sin calidad”.
El consejero de Medio Ambiente detalla que se trata de trabajar en tres líneas principales desde la Administración local: la reducción de los gases que provocan el efecto invernadero, adecuación de la población para los efectos adversos del cambio climático y eliminación de la pobreza energética.
En este documento se definen los objetivos que se deben alcanzar en los plazos establecidos para poder “solucionar el grave problema” al que se enfrenta la humanidad ante las elevadas emisiones de CO2 que se registran en todos los países.
Una situación con la que se muestran conformes los socialistas. Su portavoz, Elena Fernández Treviño, apunta que está en la línea de la Agenda 2030 que se defiende desde las siglas del PSOE, aunque reclama que se informe sobre el estado en el que se encuentra la Zona de Bajas Emisiones que está “íntimamente ligado” a este tipo de políticas.
Finalmente, Amin Azmani solicita que no ocurra como con la Declaración de la Emergencia Climática de la Asamblea que quedó en “papel mojado”. El diputado de Somos Melilla espera que el Gobierno local articule las medidas necesarias para que se contribuya a la solución de este problema medioambiental y se reduzcan las emisiones.