La Viceconsejería del Menor y Familias prevé volver a licitar el programa de educadores de calle pero quiere darle un enfoque diferente: educativo, social y terapéutico. Por ello, no ha ejercido la prórroga prevista en el último contrato, que terminó en el mes de junio. Abderrahim Mohameh ha explicado que son varias oenegés, entre ellas, Médicos del Mundo y Save the Children, las que se están encargando, de forma voluntaria, de este programa de forma altruista y trabajan con una programación en determinados horarios y lugares.
El cepemista ha repasado las diferentes actuaciones que ha llevado a cabo su área en los últimos tres meses, como el incremento de la seguridad en el centro de la Purísima en fechas puntuales como las fiestas patronales y el Día de Melilla, la reparación de desperfectos en el centro, según lo solicitado por la Fiscalía, o la apertura de nuevos espacios en La Purísima debido a la saturación para albergar a unos 80 menores.
También ha llevado a cabo la viceconsejería el inicio y la tramitación de la acometida de aguas residuales del centro de la Purísima para su conexión con la red de alcantarillado general. Una actuación, ha dicho, que el anterior Gobierno no llevó a cabo.
Las actuaciones del área del Menor y Familias también han abarcado aspectos como el apoyo y la promoción del taller de teatro y artes escénicas de la asociación Nana y la contratación de cinco administrativos, un interprete y un educador social para reforzar el personal de la sección de menores.