Tras los incidentes registrados este miércoles en el CETI, la delegada del Gobierno ha querido hoy mandar un mensaje muy claro y tajante: asegura “que no va a permitir ninguna medida de presión, ningún acto violento, ni actitudes incívicas” en estas instalaciones. Asegura que se será “inflexible” con hechos como el de ayer y advierte de que toda aquella persona que atente contra nuestras leyes y nuestras normas no saldrá impune.
Sabrina Moh entiende que “nada justifica” la actuación de ayer e insiste en que no se va a tolerar este tipo de comportamientos. Remarca que los españoles “somos un pueblo solidario que cumple con las obligaciones de respeto a los derechos humanos y a los acuerdos internacionales y que lo hacemos de forma ejemplar”. Señala que es por este motivo por lo que no se va a tolerar “que nadie agreda a las nuestras instituciones y a nuestros agentes”. Aquel que lo haga, tendrá sus consecuencias.
Pese a lo dicho, la delegada del Gobierno ha comentado que con estas declaraciones no pretende criminalizar a todos los residentes del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes ya que las protestas fueron protagonizadas por un grupo de unas 200 personas de las 1.300 que hay en estas dependencias.
Sabrina Moh, que reconoce que el CETI “vivió ayer momentos muy duros”, ha puntualizado que la situación de pandemia actual y el cierre de fronteras hace que sea imposible que muchas de estas personas puedan retornar a su país de origen