La Dirección Territorial del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) comunica que esta semana se está procediendo a la implantación del sistema flash de monitorización de glucosa intersticial a 46 pacientes con diabetes mellitus tipo II y a pacientes no diagnosticados de diabetes mellitus, pero que sí son insulinodependientes.
Este sistema que ya suministraba el Ingesa desde 2019 a pacientes de 4 a 17 años con diabetes mellitus tipo I se amplió a finales del año pasado a los adultos con diabetes tipo II (DM2), incluidas las mujeres embarazadas.
Se explica que estos sistemas de monitorización permiten que, mediante un sencillo escaneo indoloro, la persona pueda ver sus valores actuales de glucemia, así como el histórico de las mediciones de las ocho horas anteriores, así como prever la tendencia de la evolución de su nivel de glucosa en sangre en los próximos minutos.
Esta medición facilita el control de la enfermedad porque, además de poder comprobar en cualquier momento el nivel de glucosa, permite analizar los máximos, mínimos y tendencia de estos niveles gracias a los datos obtenidos por el parche sensor que puede tener una vida activa de unos 14 días y se adhiere a la parte posterior del brazo, “aunque no sustituye a la detección de los niveles de glucosa en capilares, de los pinchazos en los dedos”.
Desde la Dirección Territorial del Ingesa se destaca que en Melilla la diabetes tiene una alta prevalencia y afecta en la actualidad al 18 por ciento de la población, “por lo que forma parte de las estrategias de salud prioritarias del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria”.