El cierre de los cuatro pasos fronterizos para evitar la propagación del coronavirus ha conllevado que se utilicen métodos “antes inéditos a través del vallado” para tratar de introducir en Melilla o en Marruecos drogas, medicamentos o labores de tabaco de forma clandestina.
Según se informa desde la Comandancia de la Guardia Civil, tras la detención de varias personas como supuestos autores de tráfico de drogas “volteándola” a través del vallado, los traficantes han cambiado los lugares para realizar esas operaciones ilícitas, “así como el tipo de embalaje”, siendo ahora los paquetes más pequeños, “de unos 200 gramos aproximadamente”.
La Guardia Civil también ha constatado el intento de introducción ilícita de medicamentos en Marruecos a través del vallado fronterizo. En este caso, estas operaciones clandestinas “se realizan al amparo de la noche por lugares que cuentan con abundante vegetación, oscuridad o accidentalidad del terreno”. Hasta la fecha, han sido varias las intervenciones realizadas.
De igual modo, crecen las intervenciones de ‘taba’, un tipo de picadura de tabaco mezclado con otro tipo de plantas no identificadas que se consume masticándola y que sus efectos pueden ser nocivos para la salud. Al desconocerse su composición, “su consumo pudiera producir efectos nocivos para la salud física y psíquica”.
Se apunta que el precio de este tipo de género ha subido exponencialmente en el mercado ilícito debido a la escasez en su oferta. Se reitera el peligro que tiene su consumo, “sobre todo en jóvenes, teniéndose constancia de diversas atenciones médicas y clínicas con efectos adversos”.