La Guardia Civil ha detenido a una persona por el uso fraudulento de tarjetas de crédito de un familiar fallecido el pasado enero. Desde entonces, la presunta autora realizaba movimientos bancarios y pagos haciendo uso de tarjetas de crédito y del móvil. Valiéndose de abuso de confianza con la hija de la finada, llegó a defraudar a la familia 18.000 euros en gastos acumulados en viajes, compra de ropa, cuotas de gimnasio y pago en hoteles.
Desde la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla se apunta que, “por vinculación familiar y encontrarse la titular de la cuenta en el domicilio de la autora de los hechos”, la ahora detenida aprovechó para acceder a su terminal móvil y a las distintas clavas bancarias en el teléfono.
La investigación comenzó cuando la hija de la fallecida denunció la sospecha que un familiar estaba haciendo uso del dinero de su madre. Los gastos acumulados en apenas tres meses arrojaron una cantidad próxima a los 18.000 euros, vinculados a pagos en viajes, hoteles, restaurantes, joyerías, tiendas de ropa, compra de móviles, muebles, decoración y pagos por bizum. Llama la atención de los investigadores que en un solo día tuvo un cargo en un supermercado de la ciudad que alcanzó los 1.700 euros.
Las gestiones realizadas en el marco de la Operación ABINTESTATO han sido llevadas a cabo por el Grupo de Patrimonio de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla que, tras analizar los datos y recabar todas las pruebas documentales, logró la plena identificación de la autora de los hechos, procediendo a su detención y puesta a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Melilla, que ha sido el que ha tutelado el caso.