La huelga convocada por el Sindicato Médico de Melilla se retoma el lunes con la intención de que Sabrina Moh haga de intermediara para “abrir la negociación” con el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa).
Cree Carmen Gómez, reumatóloga del Hospital Comarcal, que los facultativos se encuentran en una “situación de enquistamiento” al no recibir ninguna respuesta por parte de la Dirección Territorial del Ingesa. Señala que, aunque la delegada del Gobierno “no tiene las competencias suficientes”, se busca su colaboración para desbloquear el problema.
Critica que la Dirección Territorial “sigue jugando al despiste” porque “no da ninguna noticia de la huelga”, pero anuncia la estabilización de cerca de 200 contratos temporales, algo que, asegura, “no tiene nada que ver con las reivindicaciones”. Sostiene que, aunque se trata de una buena noticia, lo único que se ha hecho es cumplir con la Ley de reducción de la temporalidad.
Recuerda que el objetivo de la huelga es tener “las mismas condiciones que en el resto de la península”, por lo que se demanda que se elimine la penalización del ejercicio mixto, “que se aumente el sueldo de las horas de guardia” y que se respeten las reducciones de jornada y la exención de guardia a los mayores de 55 años.