La viceconsejera de Cultura, Relaciones Interculturales e Igualdad ha inaugurado esta mañana una nueva exposición en la biblioteca municipal en la que se recogen diferentes publicaciones y obras de mujeres que han sido destacadas a lo largo de la historia, mujeres a las que se les pone rostro y voz a través de la exposición de plastilina que también acoge estas dependencias y que hace un recorrido desde la época del neolítico hasta nuestros días.
Elena Fernández Treviño ha explicado que esta iniciativa se enmarca en la celebración del Día Internacional de las Bibliotecas que se celebra cada 24 de octubre. Recuerda que, en esta ocasión, esta efeméride se desarrolla bajo el lema ‘Bibliotecas aptas para todos. Bibliotecas con la igualdad de género’.
En cuanto a la muestra, matiza que se podrá visitar hasta el próximo 5 de diciembre. Remarca que el hall de estas instalaciones se haya convertido en un espacio para promover la igualdad de género a través de la lectura y reivindicar “la literatura en femenino”.
Además de anunciar que es muy probable que la biblioteca cuente próximamente con un punto violeta, la viceconsejera ha recordado que, al margen de estas exposiciones, el lunes que viene se celebrará una tertulia literaria, “también en femenino”, que será conducida por Daniel Doblado y Sonia Rubiano. Esta actividad comenzará a las 18.00 horas y tendrá una duración de dos horas. La entrada es gratuita y se celebrará en la biblioteca pública.
Centrándose en parte del lema de este año, ‘Bibliotecas aptas para todos’, Fernández Treviño ha puesto de relieve el hecho de que estas dependencias sean accesibles para todos los melillenses. Recuerda que cuentan con ascensor y con un sistema de lectura fácil, además de disponer de una sección de novelas en escritura braille.
Por último, cabe apuntar que ha sido la poeta Encarna León la que ha dado lectura al manifiesto de este año que se presenta bajo el título ‘La sin cuento’, un manifiesto en el que se ha reivindicado la igualdad de género, en el que se apuesta por la figura de la heroína y se presenta el espacio de la biblioteca como un lugar de “grandes tesoros” y punto de partida para dejar volar la imaginación.