En nota de prensa, la Jefatura de la Policía Local ha salido al paso de las declaraciones del periodista Javier Negre quien, en un conocido programa de televisión, ha comentado que estando en Melilla llamó a la policía ante la organización de una fiesta que se estaba organizando en el hotel en el que se estaba hospedando y que los agentes le dijeron “que no podían hacer nada” y que “no podían tirar la puerta abajo sin una autorización judicial”.
La Jefatura de la Policía Local de Melilla explica que fue a las 2.56 horas cuando la sala del 112 recibió una llamada de la recepcionista del hotel, y no del periodista. Hasta el hotel se desplazó un indicativo policial que, tras hablar con la persona que estaba en la recepción, acudió a la habitación de la que procedían “la música y las voces”.
“El inquilino de la habitación”, se apunta, “fue identificado y, tal y como dicta el reglamento de convivencia de la Ciudad Autónoma de Melilla, se le comunicó que en caso de que no cesaran los ruidos y persistieran las molestias, se procedería a su denuncia”. Esta persona, se añade, “en ningún momento admitió estar celebrando una fiesta”.
De igual modo, la Jefatura aclara que los agentes de la Policía Local “en ningún momento se entrevistaron con el periodista”, por lo que los comentarios de “no podían hacer nada” o “es que no podemos tirar la puerta abajo sin autorización judicial”, aclara, “no se produjeron en ningún momento”.
Para finalizar, se señala que, una vez que los agentes se retiraron del lugar, no se volvió a solicitar de nuevo su presencia a lo largo de la noche.