El dispositivo especial establecido por agentes del Grupo de Vigilancia Administrativa y Medio Ambiente (Gruvama) de la Policía Local ha dado como resultado que dos personas han sido denunciadas por vertido de escombros en zona rural tras ser sorprendidas arrojando escombros y escayolas en un descampado.
La primera persona denunciada se enfrenta a una sanción de hasta 3.000 euros. Fue sorprendida por un agente de la Policía Local franco de servicio y que fue testigo del vertido, “anotando la matrícula del vehículo y comunicándolo al 092”. Los indicativos policiales cercanos al lugar del vertido en el antiguo depósito de Cabrerizas iniciaron su búsqueda, fue localizado en las inmediaciones y reconoció los hechos.
El segundo de los denunciados fue captado por una cámara de seguridad en las inmediaciones de la zona donde realizó el vertido, captando a la persona que lo realizaba, así como al vehículo. Citado en dependencias policiales, se le informó de lo sucedido y de la denuncia a la que debía hacer frente, “reconociendo su autoría y comprometiéndose, además, a retirar el vertido que realizó”.