Agentes de la Unidad contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) de la Jefatura Superior de Policía de Melilla han detenido a un total de 24 personas por falsedad documental, delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, estafa y organización criminal y ha emitido orden de búsqueda y detención contra otros dos miembros de la red.
La investigación se inició después de detectarse que ciudadanos marroquíes en situación irregular estaban utilizando permisos de residencia como familiar de ciudadano comunitario falsificado. Los utilizaban para cruzar el control fronterizo en puerto y aeropuerto para acceder a la península.
El modus operandi de la organización desarticulada consistía en la captación de clientes en cafés y establecimientos de determinados barrios, exigiendo a los compradores 500 euros, copia de la página biográfica de su pasaporte y dos fotografías. Les hacían creer que los documentos se tramitarían de manera legal y una vez hecho el falso les decían que se lo entregarían cuando fuera a embarcar rumbo a la península, acompañándolos incluso a comprar los pasajes.
La investigación permitió determinar que una veintena de documentos intervenidos en otras tantas detenciones durante los embarques presentaban elementos de falsedad y morfología idéntica, por lo que habían sido realizados por el mismo falsificador o al menos usando el mismo artilugio.
La Policía ha identificado al responsable de la fabricación y distribución de los documentos falso, así como al principal intermediario, única persona que tenía contacto con el falsificador. La organización se dedicaba a la fabricación y venta de documentos de viaje falsos para acceder al espacio Schengen.