La Policía Nacional detiene a 40 marroquíes que se hacían pasar por menores extranjeros no acompañados (MENAS) para aprovechar las ventajas que ofrece la tutela de la Ciudad Autónoma y busca a otros 24 individuos por la misma actividad fraudulenta.
La investigación, llevada a cabo por la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) de la Jefatura Superior de Policía de Melilla, comenzó a principios de 2022 y ha arrojado que los individuos mentían con su edad al ser identificados en la vía pública por la Policía Local con el fin de ser trasladados al Centro de Menores La Purísima. Una vez allí, manifestaban tener 17 años sin aportar ningún documento acreditativo, por lo que “desde ese instante se les dispensaba tratamiento de mena, generando de forma fraudulenta el correspondiente expediente”.
Su mayoría de edad no se conocía hasta que acudían a la oficina de asilo de Beni-Enzar, donde presentaban su pasaporte original y pedían protección internacional, con la intención de acceder a la península y “siendo perfectamente conocedores de que sus solicitudes eran admitidas a trámite transcurrido un mes debido a la sobrecarga del sistema”. Durante ese tiempo, se beneficiaban de los recursos que la Ciudad Autónoma reserva a los “verdaderos menas”, como el alojamiento en el Centro de Menores.
Se apunta que la investigación arrancó cuando efectivos de la UCRIF fueron alertados por la Policía Local y trabajadores de La Purísima al detectar la presencia de varios marroquíes mayores de edad que estaban inscritos como menores no acompañados.