La Policía Nacional ha desarticulado en el barrio del Real un nuevo punto de venta “que proveía de medicamentos de forma ilícita”. Una persona ha sido detenida y puesta a disposición judicial por un delito contra la salud pública en su modalidad de tráfico de drogas.
Fue el pasado mes de marzo cuando se inició una investigación después de que agentes de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Jefatura Superior de Policía de Melilla apreciaran un aumento significativo del consumo de sustancias estupefacientes -como benzodiacepinas y opioides- en la vía pública. Tras analizar lo intervenido, se confirmó que no estaban adulteradas “y podrían provenir de la adquisición legal en farmacias con prescripción médica para su distribución ilícita”.
Se determinó que una persona se desplazaba a lugares en los que sabía que habría gran afluencia de jóvenes y ofrecía este tipo de psicofármacos a precios muy asequibles “y que rondaban los 5 euros por unidad, lo que facilitaba la adicción entre menores muy vulnerables por encontrarse algunos de ellos en situación de desamparo”.
Con una orden de entrada y registro en el domicilio del presunto autor, los agentes intervinieron numerosas dosis de ansiolíticos como el tranxilium, hipnóticos como el diazepam e incluso opiáceos como el tramadol o trozos de hachís, procediéndose a la detención del investigado por un delito contra la salud pública “en su modalidad agravada”.