Las obras de modernización y refuerzo de la seguridad en la valla fronteriza de Ceuta y Melilla comenzarán antes de que acabe el mes de noviembre, una vez concluidos los preceptivos trámites administrativos. Los trabajos, que tendrán una duración de diez meses y cuentan con un presupuesto de 17,8 millones, 8,3 para Ceuta y 9,5 para Melilla, supondrán un refuerzo de la seguridad en toda la valla y permitirán la sustitución de las concertinas y las sirgas tridimensionales en todo el perímetro por otros elementos más seguros y menos lesivos.
Esta obra es una de las medidas del Plan de Refuerzo y Modernización del Sistema de Protección Fronteriza Terrestre en Ceuta y Melilla aprobado en Consejo de Ministros en enero de este año con una inversión total de 32 millones de euros.
El Ministerio del Interior ha encargado la ejecución de las obras a Tragsa, que llevará a cabo a partir de noviembre la recimentación del vallado y la sustitución de las concertinas así como la construcción de nuevos tramos en las zonas de mayor vulnerabilidad, con un incremento de altura de hasta diez metros.
Además de este refuerzo de la valla, ya que se han instalado sistemas de reconocimiento facial en los puestos fronterizos de Beni Enzar, Barrio Chino, Mariguari y Farhana en Melilla y se están llevando a cabo la instalación de una nueva red de fibra óptica y ampliación del sistema de circuito cerrado de televisión en el perímetro fronterizo de la ciudad.