Los médicos de familia y pediatras de Atención Primaria harán huelga mañana para reivindicar la adecuación de las plantillas en función de las necesidades asistenciales, la “desburocratización de la consulta”, la sustitución de las ausencias y la aprobación de medidas en Melilla como área de difícil desempeño. Posteriormente decidirán si mantienen el parón en el tiempo como viene ocurriendo con la atención especializada del Hospital Comarcal.
Sosteniendo que los centros de salud melillenses tienen la plantilla más envejecida de toda España, que no hay reemplazo generacional y que los cupos de tres de los cuatros centros de salud superan los 1.650 pacientes, comunica la Plataforma de Médicos de Familia de Atención Primaria que “urge la necesidad” de incrementar los recursos humanos y económicos para garantizar una asistencia sanitaria de calidad, solicitando “la apertura urgente de un proceso de negociación” con el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa).
Propone incorporar un médico de familia a cada centro de salud menos al de la Zona Centro, donde se valorará añadir “una nueva plaza a corto plazo”. Que se disponga de unos diez minutos por paciente es otras de las demandas. Esto haría que se limite el número de consultas de los médicos de cabecera a 38 y el de los pediatras a 30. Sugiere, asimismo, la autogestión de las agendas para “poder realizar una correcta cartera de servicios” y aumentar las plazas MIR en Medicina Familiar y Comunitaria a cinco, asegurando un contrato continuado de dos años a los residentes “para fidelizar y consolidar a los que se forman” en nuestro área.
Lamenta la “situación de desamparo” en la que se encuentra sumergida la Atención Sanitaria y la “inexistencia” de una planificación sanitaria a medio y largo plazo por parte de “los diferentes gobiernos”, lo que, dice, ha provocado que el sistema sanitario sea “ineficiente” y esté “colapsado”.