A través de UGT, los trabajadores del 061 denuncian que la Dirección Territorial del Ingesa “ha eliminado una de las ambulancias que viene prestando servicio en la ciudad”, una unidad que se sumó durante el COVID “y que, posteriormente, se quedó en el servicio del 061 como refuerzo debido al aumento exponencial de servicios urgentes en Melilla”, por lo que a partir de ahora tan sólo se contará con una UVI móvil y con dos vehículos de soporte vital básico.
Se apunta que la ambulancia en cuestión lleva realizados del orden de 1.200 servicios desde principios de año y que esa decisión del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria “repercutirá de forma muy negativa en la calidad asistencial que reciben los melillenses”, ya que el servicio que hasta ahora prestaba “deberá ser absorbido por las otras dos ambulancias del 061, por lo que mermará la calidad asistencial a la población, ya que con menos unidades se tienen que cubrir los mismos servicios”.
Los trabajadores del 061 no entienden por qué se acuerda esta medida “después de haber trasladado al Ingesa en varias ocasiones durante los últimos meses la necesidad de ampliar la flota de ambulancias debido al aumento de servicios que se deben atender”, un asunto que, se subraya, a día de hoy se mantenía sobre la mesa y en proceso de estudio. A esto se añade que preocupa la pérdida de puestos de trabajo, “ya que, como es lógico, al quitar una ambulancia, habrá recortes, teniendo que despedir a seis trabajadores”.
Se concluye aseverando que el personal del 061 de Melilla trabajará en un calendario de movilizaciones “que culminará en una huelga si por parte de la Dirección Territorial del Ingesa no se da una solución al incumplimiento de sus propias promesas”.