Confirmado por el Ministerio de Sanidad que Melilla avanza a la fase 2 del plan de desescalada, se suceden las reuniones para fijar las actuaciones para que estén “bien claras y diseñadas” de cara a la entrada el próximo lunes en esa nueva fase. En todo caso, la noticia a destacar este sábado es que Melilla no registra ningún caso por COVID-19. Las cuatro personas que tenían coronavirus activo se han recuperado, “por lo que hay cero personas ingresadas en el Hospital Comarcal y en los domicilios tampoco hay ninguna persona con COVID declarado”.
El consejero de Políticas Sociales destaca que, desde el inicio de la pandemia, en Melilla se ha hecho un seguimiento exhaustivo de su evolución, una ciudad en la que, aunque tiene que lamentar el fallecimiento de dos personas, tiene la menor tasa de mortalidad de todo el país, así como la menor incidencia acumulada en los últimos 14 días de todo el territorio nacional.
Mohamed Mohamed Mohand reconoce que estos datos transmiten “un mensaje de esperanza, de vuelta a la normalidad”, pero, de igual modo, recuerda que el virus sigue existiendo “y que, por lo tanto, debemos comportarnos con la suficiente diligencia y la máxima responsabilidad, porque es muy sencillo volver a repuntar y volver a momentos de confinamiento, de nula actividad económica y de reducida actividad social”.
El director territorial del Ingesa se felicita porque es el primer día desde el 12 de marzo en el que en Melilla no hay pacientes con COVID activo. “Después de 70 días de intenso trabajo en el área sanitaria de Melilla”, reconoce el esfuerzo realizado por el personal del Ingesa “en muchos frentes”, Omar Haouari pide que se sigan extremando las precauciones, “especialmente en los días de fiesta que vienen en esta semana”.
Con el objetivo de “seguir avanzando hacia esa nueva normalidad”, por lo que se apuesta es por una transición escalonada que ayude a la recuperación del sector económico. Además, el consejero Mohamed Mohamed Mohand avanza la convocatoria extraordinaria de una comisión para abordar los asuntos relacionados con las políticas sociales, cómo gestionar la desescalada en la Residencia de Mayores del Imserso, el Gámez Morón o el Centro Asistencial. Asimismo, durante este fin de semana se analizará la vuelta a la normalidad “si fuese posible” en las playas y piscinas.
En este punto, ha indicado que la reapertura de las playas está “supeditada” a la reunión que se mantendrá con los técnicos y el consejero de Medio Ambiente y al Plan de Playas que se ha diseñado, “que debe estar relacionado con el distanciamiento social y las medidas de higiene que ha trasladado el Ministerio de Sanidad”. Matiza que, “evidentemente”, no se autorizará la apertura de las playas de Melilla “si ese plan no es apto o no se puede presentar en tiempo y forma”. Con respecto a la apertura de las piscinas de urbanizaciones privadas, el consejero apunta que la Dirección General de Salud Pública y Consumo trasladará las instrucciones precisas.