Abderrahim Mohamed atribuye a varios factores el incremento del número de menores extranjeros no acompañados que se registra actualmente en la ciudad. Así, el viceconsejero tiene claro que el traslado a la península de los menores y la posibilidad de conseguir la documentación provoca un efecto llamada entre los jóvenes de la zona más cercana de Marruecos, pero también influye la implantación del servicio militar en el país vecino y la necesidad de incrementar los controles en la frontera.
En este sentido, el cepemista ha solicitado a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que extremen las medias en la frontera para evitar la entrada de estos menores, la gran mayoría de 17 años.
A día de hoy, la Ciudad Autónoma acoge a 882 menores en Purísima, a 51 en el centro de menores infractores, a 181 en el Centro Asistencial y a 32 en Divina Infantita. Preguntado por la construcción de un nuevo módulo, el viceconsejero ha detallado que no hay novedades y que se están acondicionando los espacios actuales, como los salones y comedores. En cuanto al nuevo contrato, ha avanzado que los técnicos están redactando los pliegos.
Por lo que respecta al programa de educadores de calle, que no cuenta con presupuesto para este año, ha asegurado que no se ha descartado y que se retomará en un futuro. Abderrahim Mohamed ha matizado también que los menores que están en la calle rondan los 50-60 y que las oenegés están trabajando para devolverlos a los centros.