Mustafa Aberchan recoge el guante y dice que “ahora mismo” firma que en Melilla no se acepte ningún voto por correo, un sistema que, según sus palabras, “en la ciudad ha prostituido la libertad”. En respuesta a la propuesta lanzada por Juan José Imbroda, el líder de CpM la acepta “de inmediato” y “va más lejos” al plantear la posibilidad de abrir “a la transparencia absoluta” las sedes de los partidos políticos que concurrirán a las elecciones “para que pueda entrar cualquier agente de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para fiscalizar si la gente que se acerca lo hace realmente por el proyecto ideológico”.
Asegura que, además de “estimularle”, ese tipo de propuestas son un desafío para comprobar “quién no es capaz de hacerlo”. En este punto, ha emitido un audio en el que un hombre “que vota al Partido Popular” se compromete a “comprar todos los votos” de la familia de la persona a la que se dirige. Preguntándose “si esto es o no es un delito”, cree que se debería investigar, máxime “si se supiese que este personaje asistió a la ruptura de ayuno organizada hace dos días por el PP”.
Subrayando que “es la triste realidad de lo que ocurre en este pueblo”, el presidente de Coalición por Melilla asume que el voto libre en la urna “sería lo más saludable”. Entiende que es “escandaloso” que “la probabilidad más certera” por “el ritmo que se lleva” es que en Melilla se superen las 6.000 solicitudes de voto por correo, tal y como apuntó en COPE Melilla el secretario general de Comisiones Obreras en Correos. En este sentido, dice que el voto por correo “está siendo una estrategia nacional de partidos nacionales para conseguir algo que se quiere ocultar”.