Una veintena de personas participaba este fin de semana en la protesta organizada por ‘Guelaya-Ecologistas en Acción Melilla’ para denunciar el estado de la desembocadura del río de Oro donde se producen continuos vertidos sobre el agua estancada de la fuente creada por el Gobierno de la Ciudad.
Rosa González, una de las integrantes de este colectivo, destacaba algunas de las soluciones para renovar el agua estancada en la desembocadura del río de Oro y evitar que llegue contaminada al mar.
Manuel Tapia, otro de los miembros de Ecologistas en Acción Melilla, recuerda que su colectivo ha presentado hasta mil denuncias por los continuos vertidos de aguas fecales en la desembocadura del río de Oro y, consecuentemente, en las playas donde está permitido el baño.
A preguntas de los medios, el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, ha declinado hacer declaraciones sobre el estado de las aguas de la desembocadura del río de Oro.