Diversos representantes políticos han realizado un llamamiento a la calma a todos los melillenses tras los altercados sucedidos durante el desarrollo de una manifestación pro-Palestina en la tarde de ayer. Resaltan la defensa de la convivencia multicultural que caracteriza históricamente a la ciudad autónoma del norte de África.
El presidente Juan José Imbroda pide que, «por muy dolorosos que sean», los conflictos del exterior no repercutan en la convivencia «ejemplar» de la que disfruta Melilla. Dice que la ciudad ha demostrado «que es posible vivir en paz y en concordia».
Traslada su deseo de que se alcance «una paz justa y duradera» entre Israel y Palestina.
Por su parte, la delegada del Gobierno pide “cordura” para que la “concordia, la convivencia y la buena vecindad” sigan estando presentes en la ciudad, a pesar del conflicto exterior.
Destaca Sabrina Moh que, aunque la concentración en apoyo a Palestina “derivó en manifestación” con gritos a las puertas de la sinagoga Or Zaruah, no se produjo ningún “altercado reseñable”. Subraya que cuando se solicita un permiso para una protesta “hay que ceñirse a lo comunicado” porque, de lo contrario, se producen “desajustes en el normal funcionamiento de la ciudad”, tal y como sucedió ayer.
Insiste en que “no se puede acabar con el odio con más odio” y anuncia que se ha activado un dispositivo especial de seguridad en los “puntos más calientes” con el fin de “conservar la buena relación entre culturas y religiones”.
Por último, la secretaria general del Partido Socialista apunta que Melilla “es una ciudad ejemplo de convivencia”. A pesar de que “todo el mundo tiene derecho a manifestarse”, Gloria Rojas recalca que todos debemos “trabajar de forma unida” para mantener la ciudad intercultural que “siempre ha demostrado ser”.