Cuatro meses después, continúa la huelga sanitaria en Ceuta y Melilla y así continuará hasta que no se dé respuesta a las demandas planteadas por los médicos de Atención Especializada, Atención Primaria, 061 y del SUAP. «Después de haber repetido hasta la saciedad cuáles son los problemas reales en cuestión de recursos humanos», reconoce Justo Sancho-Miñano que lo único que se han encontrado los médicos en huelga «ha sido incompetencia y una absoluta falta de respeto tanto a la profesión médica como a la población».
Sin entender que se haya «politizado» una huelga que, recuerda, se comenzó a gestar «intensamente» hace nueve meses, apunta el presidente del Ilustre Colegio de Médicos de Melilla, miembro del Sindicato Médico de Melilla y del Comité de Huelga que existen informes de la Inspección de Trabajo en los que se «advierte» que se superan las horas trabajadas «por la falta de recursos humanos». Detalla en La Mañana de COPE que el Hospital Comarcal cuenta con 135 médicos, de los que 58 superan los 55 años.
«Aunque parezca que no», asume Sancho-Miñano que las demandas han llegado «a donde tenían que llegar». Al silencio del ministro de Sanidad le suma el del presidente del Gobierno y del defensor del Pueblo, de ahí que se haya optado por reclamar la intervención de la Comisión Parlamentaria de Peticiones (PETI) del Parlamento Europeo para solucionar la huelga sanitaria vigente en Ceuta y Melilla. Confía en que con esta vía «se deje en evidencia» el «desastre de gestión» de un ministerio que tan sólo tiene que «pilotar» las áreas sanitarias de ambas ciudades autónomas y el Centro Nacional de Dosimetría.
«Indolencia casi sádica»
Con respecto al Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, sostiene que es una institución «incompetente en sí misma». Reconoce Justo Sancho-Miñano que «lo que más rabia da» es la «indolencia casi sádica» sobre los problemas sanitarios que se sufren en Ceuta y Melilla. Aclarando que no ha habido ningún tipo de acercamiento o contacto con el director territorial del Ingesa, niega categóricamente que la apertura del Hospital Universitario vaya a suponer «que legiones de médicos aporreen la puerta para venir a trabajar a Melilla». Insiste en que las condiciones laborales «no son las que tienen que ser» y remarca que «no se ha hecho absolutamente nada» desde que en febrero los puestos de trabajo del personal sanitario del Ingesa en Ceuta y Melilla fueron declarados como de difícil cobertura.
Determina que llegarán «hasta dónde haga falta y nos dejen» porque, remarca, de esta huelga «depende de una sanidad fuerte en la que exista una capacidad de atraer y retener el talento». En este punto, matiza que a final de año se convoca un concurso de traslados del Sistema Andaluz de Salud (SAS) «en todas sus vertientes y en el que Ceuta y Melilla caben un par de veces».