La jefa de la Unidad Contra la Violencia de Género de la Delegación del Gobierno asegura que el pin parental es un veto a la educación pública y libre, que quita valor al profesorado. Laura Segura Sarompas recuerda que los docentes reciben durante la carrera educación en igualdad, libertad, diversidad y considera “impensable” que desde las casas se pueda censurar la formación que se imparte en los centros públicos, ya que para eso, cree, están los privados.
En este sentido, apunta que, ante los intentos de privar al alumnado del derecho a la educación, las instituciones tienen la responsabilidad de explicar con claridad que la educación va más allá de la mera transmisión de conocimientos y forma a los ciudadanos en libertad. Ante esta situación, Segura pide que se deje a los profesionales de la educación su trabajo.