Somos Melilla lamenta que los melillenses tengan que soportar “cortes continuos en el suministro de agua” en los domicilios después de que la planta desalinizadora haya sido inaugurada hace 16 años y de las numerosas promesas del Partido Popular y el Partido Socialista de tener agua potable durante 24 horas del día.
Amin Azmani considera “incomprensible” que se soporte esta situación cuando se realiza una inversión de unos cuatro millones de euros al año para su mantenimiento para que continúe ofreciendo agua “sin ser apta para el consumo por su elevada salinización y el mal estado de la red de distribución”.
Critica que ningún Gobierno ni local ni nacional “ha puesto remedio a esta situación” y ni tan siquiera han sido capaces de poner en funcionamiento el Pantano de las Adelfas que “garantizaría agua durante diez días seguidos en caso de avería”. Concluye Azmani que, como diputado electo, exigirá en la Asamblea al nuevo Ejecutivo de la ciudad que este asunto “sea tratado con máxima prioridad”.