Somos Melilla tacha de “tercermundista” la gestión que se hace sobre el agua en la que lamenta que “en pleno año 2023 se sigan soportando cortes de agua” continuamente, provocando “un calvario” en todos los hogares y las empresas que deben desempeñar su actividad.
El diputado de la Asamblea, Amin Azmani, señala que aún existen barrios en la ciudad como la Constitución o las Palmeras donde el agua no tiene la presión suficiente o con estrangulamientos en el suministro todos los días desde que en el 2007 se inaugurase la Planta Desalinizadora. Un problema del que, apunta, aún no hay solución a pesar de que han existido gobiernos en manos de diferentes partidos políticos como el Partido Popular, el Partido Socialista o Coalición por Melilla.
Azmani denuncia que “no hay visos de cambios” porque, a pesar del cruce de reproches y acusaciones, “nadie pone un remedio definitivo”.
Entre las medidas que anunció el consejero Manuel Ángel Quevedo se encuentra la subvención para las instalaciones de depósitos y aljibes en las viviendas, una iniciativa que, sentencia el diputado de Somos Melilla, “no genera agua potable”, ni evita los cortes.
Exige que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir “agilice la reforma de la desaladora que se está haciendo eterna” y que se ponga “manos a la obra” para que el Pantano de las Adelfas se conecta a la red de abastecimiento después de haber invertido siete millones de euros “sin que se haya utilizado para su cometido”.