La consejera de Políticas Sociales insiste en que la solidaridad para el reparto de menores debe ir acompañada de una financiación para las diferentes comunidades receptoras y vuelve a pedir la Conferencia de Presidentes para abordar esta cuestión.
“Desde Melilla entendemos que no hay otra vía posible más que la solidaridad”, ha dicho Randa Mohamed, pero añade que “no se puede pedir obligatoriedad” a las comunidades receptoras de los menores porque deben tener “la financiación correspondiente”.
La responsable del área de Políticas Sociales del Gobierno local entiende la postura de los territorios que se oponen a la modificación de la Ley de Extranjería, ya que considera que es un asunto que debe resolverse por “consenso” en una Conferencia de Presidentes y comenzar a “reglamentar” los repartos, acompañándolos de una cantidad económica acorde para evitar que las distintas regiones deban utilizar sus fondos.
Actualmente, el Centro de la Purísima alberga a unos 210 menores, teniendo una capacidad para cerca de 237.
Según Randa Mohamed, este verano habrían entrado unos 20 nuevos menores a nado, cifras muy lejanas a fechas previas al cierre de la frontera, llegando a tener alrededor de 2.000 en Melilla.