Miguel Ángel Fernández reconoce que desconocía que la Ciudad Autónoma ya había procedido al abono de 400.000 euros del convenio suscrito con la Real Federación Española de Fútbol para la puesta en marcha de un centro de formación en el campo de la Espiguera.
Apunta que es un proyecto que no ha continuado por el importante aumento en los costes, multiplicando por tres veces el precio inicial, y porque supone una “competencia desleal” para las empresas privadas.
El consejero de Deportes ha querido aclarar estos datos en los que cometió un error durante la rueda de prensa del pasado lunes en la que se anunció la paralización de esta iniciativa que había contado la “la oposición manifiesta del Partido Popular”.
Profundiza en los motivos que han conllevado a que la Ciudad Autónoma haya decidido detener la construcción de este espacio. Ha apuntado el “aumento sustancial” en la cuantía que debía abonar la Administración local pasando de uno a más de tres millones de euros si se decidiera continuar con esta iniciativa que, además, supone un problema para las pymes de la ciudad.
Fernández determina que esto no forma parte de “la política deportiva” que quiere llevar a cabo, pero sí lo es la inversión en las instalaciones. Un compromiso adquirido durante la campaña electoral y que materializará en el año 2024 en el que el Gobierno local se marca como prioridad la puesta en marcha de, al menos, un nuevo campo de fútbol para atender a la “necesidad acuciante” de los melillenses.
