Chakib Mohamed reconoce que la situación de la frontera “está haciendo mucho daño” al sector de la hostelería de la ciudad, al entender que los marroquíes optan por no venir a Melilla a consumir en los diferentes establecimientos ante las largas colas que tienen que sufrir en Beni Enzar.
En declaraciones a COPE Melilla, asegura que esta situación perjudica también al sector empresarial, agraviado por el actual régimen de viajeros que impide poder pasar mercancía de Melilla a Marruecos.
El presidente de la Asociación de Hostelería atribuye a este hecho la bajada que se ha registrado en la facturación de los locales, algo a lo que suma que un gran número de melillenses haya decidido pasar sus vacaciones de verano en la península.
Aunque puntualiza que los bonos turísticos que promueve el Gobierno local están teniendo muy buen resultado, porque son muchos los foráneos que vienen a Melilla, la realidad, señala, es que “son más los ciudadanos que se marchan que los que llegan”.