El Partido Popular teme que el Ingesa no sea capaz de poner en marcha ninguna actuación en el marco del Plan de Acción de Salud Mental y que se tenga que devolver la partida que ha recibido Melilla (que asciende a casi 300.000 euros), tal y como ocurrió el año pasado.
La diputada en el Congreso, Sofía Acedo, ha explicado que en 2023 la ciudad recibió 1,2 millones de euros. El Ingesa, apunta, tuvo que devolver un millón porque no fue capaz de desarrollar ningún programa. Si no se reembolsó la cuantía completa fue porque se utilizaron los 200.000 euros restantes en un programa informático.
En este contexto, Acedo ha recordado que el PP presentó una propuesta para la puesta en marcha de un programa de salud mental infanto-juvenil, por los problemas que este colectivo presentaba tras la pandemia de la Covid-19.
La popular ha criticado que el Gobierno central no aceptase este programa. “No sólo nos dijo que no en la respuesta parlamentaria, sino que lo ha llevado a efecto en el Plan de Acción para la Salud Mental. El dinero que se ha presupuestado para Melilla se tiene que devolver, año tras año, porque son incapaces de poner en marcha el programa”, matiza. Entre otras razones, porque el Ingesa y el Imserso, dice, no se ponen de acuerdo en la cesión de unos locales donde poder desarrollar esta iniciativa.
La diputada de la Cámara Bajas sostiene que este es un ejemplo más de la “incapacidad y de la inacción” del Gobierno de España para con Melilla.