El Sindicato Médico de Melilla lamenta que la huelga de facultativos haya cumplido un año sin que el Instituto de Gestión Sanitaria (Ingesa), y por ende el Ministerio de Sanidad, hayan “hecho nada positivo” para solucionar las reivindicaciones de ambas ciudades autónomas, lo que ha provocado que la situación sea “aún más crítica” que la que se denunció el 9 de marzo de 2023.
Resalta Elisabeth García Cortacero que el Hospital Comarcal tiene cada vez menos médicos como consecuencia de las jubilaciones y del “cansancio” que sufren muchos profesionales, quienes deciden trasladarse a otros destinos en busca de mejores condiciones. En este sentido, critica que hay muchos servicios “colapsados” y que se afronta el periodo vacacional “sin garantías de poder ofrecer una asistencia de calidad a los ciudadanos”. Los centros de Atención Primaria también están experimentando esta falta de facultativos, lo que provoca “cupos excesivos de pacientes y profesionales desbordados desde hace muchos meses”. Lamenta la presidenta del Sindicato Médico de Melilla que los especialistas del 061 continúan “sufriendo” un convenio que data de 2007 y que no tiene en cuenta la turnicidad, los turnos de noche y los festivos, “generando un agravio comparativo”.
Y aunque el pasado mes de febrero se decidió dar una tregua a la huelga como muestra de confianza a Mónica García, se ha recibido la “misma respuesta de siempre: nada de nada”. Destaca que se trata de una “dejación de funciones”, porque los responsables políticos, aun conociendo la situación”, no plantean alternativas para solucionarla. Dice que un ejemplo de esto es que haya pasado más de un año desde que se declaró a Ceuta y Melilla como zonas de difícil cobertura, una determinación que de momento no ha acarreado “ni una sola decisión para respaldarla”.